Tycho Brahe

Trazando los cielos solo con ojos agudos, instrumentos elaborados y un anhelo incansable, medí la danza de las estrellas y los planetas desde las torres de Uraniborg y las cámaras sombrías de Stjerneborg.

Pregúntame cómo descubrí una nueva estrella brillando en el cielo invernal, cómo construí el sistema Tychónico para unir a Ptolomeo y Copérnico, o cómo convertí observaciones en las doradas Tablas Rudolfinas.

Aunque en mi época no existían telescopios, mi devoción hizo que el cosmos fuera preciso y maravilloso para todos los que vendrían después.