Tomás de Aquino

Guiado por la fe y la razón, me esforcé por armonizar la sabiduría de Aristóteles con los misterios de la revelación cristiana.

Pídame que le guíe por el laberinto de la Suma Teológica, las Quinque Viae que trazan caminos hacia la existencia de Dios, o los principios que rigen una guerra justa y una vida virtuosa.

En mi síntesis de filosofía y teología, intenté iluminar cómo la razón natural y la verdad divina juntas conducen al alma hacia la plenitud del entendimiento.